domingo, 10 de octubre de 2010

Las próximas elecciones internas y las lecciones de la historia

Allá hacia fines de 1971 - 1972, comencé a militar en una Juventud Radical Revolucionaria y en la Auténtica Franja Morada de Derecho, agrupaciones que sostuvieron un proyecto inconcluso, un proyecto inacabado, un proyecto a futuro, un proyecto que reivindico aún hoy y del que estoy orgulloso, porque sigue siendo un proyecto popular nacional y democrático.
Vivo en Vicente López desde 1990. Hasta entrados los años 90 continué mi actividad política en el Distrito Capital (ahora llamado Ciudad Autónoma de Buenos Aires), allá por el año 2000 por cuestiones laborales tuve que fijar mi domicilio legal con el real en este Distrito; fue así que luego de algunos años sabáticos y porque esta actividad – parafraseando a Julio Cortázar cuando dice que escribir es una marca y un atributo como ser rengo, tuerto o francés que no se puede ocultar ni dejar-, me vincule políticamente a un grupo de amigos a los que conocía porque creo desde muy chico que las cosas se cambian de adentro , ellos dando una prueba de generosidad pocas veces vistas en esta actividad donde el egoísmo es moneda casi corriente me invitaron a participar de un proyecto que venían gestando hace un tiempo y fui invitado para acompañar con mi firma el lanzamiento de la Red Raúl Alfonsín – Radicales de Vicente López.
Como es público y notorio, porque siempre hay distraídos y malos intencionados, no formo parte de la nómina de empleados municipales de Vicente López.
Este breve relato de los hechos me permite abusando de la generosidad de mis correligionarios y amigos tener una visión algo distinta acerca de los dirigentes de la UCR de Vicente López. De los dirigentes nacionales que integran ese acuerdo por el espanto que se llaman Leopoldo Moreau, María del Carmen Banzas, Federico Manuel Teobaldo Storani, Gustavo Posse & Cía. Tengo una opinión política formada a lo largo de casi cuarenta años, abundo sobre alguno de estos dirigentes que voy a sintetizar con estrofas de dos poetas contemporáneos un rosarino: “….a mi el tiempo me puso en otro lado” y un catalán: “… entre esos tipos y yo hay algo personal”.
Ellos representan una forma de hacer política; yo aspiro a otra. Esto es así de sencillo.
En Vicente López no se hay elecciones internas desde hace casi 10 años.
Enrique García manejo el destino de partido primero y del municipio después igual que muchos de sus colegas desde Jujuy hasta Rio Grande (y sito estas dos ciudades no a título de metáfora sino en forma literal. Como vecino apruebo y disfruto de algunas de sus obras públicas, padezco problemas derivados de la ausencia y/ o el retroceso del Estado Municipal y encuentro otras francamente incomprensibles. Pero eso es otro tema, que se irá a colar por la ventana en el desarrollo de estas ideas más adelante.
El problema se plantea con mayor fuerza y si se quiere visibilidad política para el radicalismo, cuando empieza a dar señales de recuperación institucional, no por acciones políticas coherentes y constantes, sino por un acto político puntual realizado por Julio Cobos (que dicho sea de paso conto con el apoyo logístico de la plana mayor real de la UCR, que lo rodeo y acompaño), para que en un acto de racionalidad política y coherencia con sus convicciones votara en contra de la Res 125. Este hecho generó un tsunami holográfico gestado virtualmente por la Presidente y su cohorte de ad larates, una inconsistencia verbal incendiara construida por Néstor Kirchner hablando de los comandos civiles, de los grupos de tareas, de la gesta de los humildes para encontrar un lugar bajo el sol, del rol de los medios, etc.
La muerte de Raúl Alfonsín y la ceremonia mortuoria popular y espontánea en derredor de su figura primero, y la revaloración de su figura desde lo político, histórico e institucional después, fue como el apalancamiento que la UCR necesitaba pare erigirse como lo que es un partido de 120 años que está enraizado en el conjunto del pueblo argentino, mucho más allá de las mezquindades e hipocresías que a través de ríos de tinta usaron jubilados a sueldo del Estado y algún filosofo que se cansa de hablar de Ezequiel Martínez Estrada y los grandes pensadores contemporáneos, cuando por su práctica y su discurso se parece más a un aprendiz adelantado de la cátedra libre de comunicación social práctica cuyo titular es el Dr. Joseph Goebbels.
Las elecciones de julio fueron un hito más que permitió consolidar nuevamente en el imaginario colectivo el rol de las instituciones, todo esto batido con los intereses de los medios de comunicación social que juegan su partido en el medio.
En este contexto generalizado donde prima la confusión, se inicia un proceso electoral interno en la Provincia de cara al 2011.
Es así que se configuran las dos corrientes que disputaran la dirección de la UCR.
Paradójicamente el Plenario de Comité Provincia decide por fuera de toda lógica política y al margen de las disposiciones legales excluir al Distrito de Vicente López del cronograma electoral.
Quienes integramos la Red Raúl Alfonsín – Radicales de Vicente López analizamos la cuestión y llegamos a las siguientes conclusiones

- El mandato del interventor esta vencido

- El partido en orden distrital acéfalo

- La convocatoria está viciada de nulidad

- Se violan derechos y garantías consagradas en la Constitución Nacional y en la Carta Orgánica Partidaria

- Intentadas gestiones políticas para encaminar esta situación no hubo respuesta de parte del sector que hoy detenta la mayoría del Plenario de Delegados del Comité de la Provincia.
Sólo nos quedo como salida al carrefour que nos plantearon la acción legal.
La justica federal con competencia electoral nos da la razón y ordena incluir a nuestro distrito dentro del cronograma electoral y de así estimarlo pertinente adecue el cronograma electoral para con lo dispuesto en la Carta Orgánica Paridaria..
La verdad es que nuestro grupo estaba ayer (4 de mayo), en condiciones legales de presentar la lista del distrito y de los subcomité barriales con sus respectivos avales.
El resto de los grupos no.
En el medio de todo este relato el MODESO-CON agita el fantasma de un acuerdo entre Ricardo Alfonsín y Enrique García. El problema es que Enrique García, Fabián Gnoffo, Willy Ruiz y otros varios de quienes integran Causa Popular Renovadora o el Frente Vecinal de Vicente López, están expulsados de la UCR por haber integrado listas con otros partidos.
Un tema no menor, pero en esa misma situación están alcanzados por las generales de la ley todos aquellos que hicieron lo mismo o bien que integraron las listas del ACS en representación de otros partidos. No hago nombres porque no me parece pertinente pero de ser necesario me voy al almacén de la esquina compro un rollo de papel de cocina y empiezo, aclaro que la lista es tan, tan, pero tan larga, que sería más serio, saludable y hablaría mejor de nosotros si empezamos a discutir política y no nombres, porque acá corre lo que dicen las sagradas escrituras de la cristiandad alguna vez ese hombre santo llamado ישו “…el que esté libre de culpas que tire la primera piedra”.
Ahora el fin reconstruir el radicalismo en Vicente López es una tarea colectiva, una tarea que necesariamente implica generar consensos amplios, la elaboración de una agenda política local de desarrollo económico, social, sanitario, educativo y medioambiental. Una agenda que se proponga como norte cohesionar socialmente y promover el empleo registrado. Este demanda de todos nosotros esfuerzos de imaginación para salir del laberinto sin despertar al Minotauro por que pueden suceder dos cosas:

• el Minotauro nos devora;

• los dioses nos castigan a repetir el castigo impuesto a Sísifo

La necesidad de encarar el futuro unidos requiere de todos nosotros gestos de grandeza, actos de desprendimiento y generosidad, mucho más visibles de aquellos que fueron consagrados por el voto popular para cargos de representación política institucional.

Negar esto es vivir en un país de ficción.

Soslayarlo una muestra más de soberbia.

Pensar que todo puede ser alegremente soslayado, demuestra el grado de miopía política y la ausencia de una lectura crítica y real de la sociedad contemporánea, como asimismo de los nuevos desafíos y retos que esta nos plantea a cada paso.

Vuelvo sobre esto porque estimo que no es un hecho menor.

En ese contexto la presencia de Enrique García no ha pasada desapercibida y su marca está presente en el tejido urbano y social de nuestro pueblo.

Quien niegue para bien o para mal esto no entiende nada de estas cosas

Sin embargo y a pesar de todo debe intelectualmente hacer una disquisición que no es menor. Nuestra sociedad es una sociedad necrofílica, cuando las personas están vivas se las suele denostar con una liviandad absoluta, se habla de su integridad moral, y de su vida sin importar nada. Sucedió salvando las distancias con Hipólito Yrigoyen, con Marcelo T. de Alvear, con Moisés Lebenshon, con Crisólogo Larralde, con Ricardo Balbín y recientemente con Raúl Alfonsín.

Solo la muerte, la escenificación de la ausencia resalta los logros que en vida les fueron negados, por muchos de sus contemporáneos.

Yo creo en eso, por eso lo digo y lo resalto, porque no me gusta que después cualquier pelafustán encuadernado en piel humano sostenga alegremente y con patente de corso en el bolsillo una oración fúnebre acompañada con lágrima de cocodrilo, frente el cuerpo inerte de un hombre al que le amargaron la vida en esta tierra.

La mía es una visión que entiendo posee una carga de honestidad intelectual, por eso lo digo, nada más que eso.

Hace ya muchos un abogado joven de treinta y seis años, que había sido llamado “el incorruptible” subía engrillado los escalones que lo conducían a la guillotina, Maximilien François Marie Isidore de Robespierre, de él se trata, que había nacido en la ciudad de Arrás, murmuró una frase que dicen los que cuentan la historia de los hombres que hacen la historia, sólo alcanzó a escuchar su verdugo y después repitió: “…los hombres se equivocan y no tienen tiempo”, esa frase me marco la vida, las acciones políticas que realizo y me sirve para entender algunas cosas que pienso, sostengo y hago; y se que la historia a mí también me juzgará.

Si el devenir de la historia torna necesario acordar políticamente en aras de una posición superadora habrá que acordar aunque queden en el camino amigos que no lo entiendan, por un lado y mentirosos que se bañan en el discurso hipócrita del agua bendita, o de quienes histéricamente declaman el bien y la moral, como si en la vida todo fuera blanco o negro o como hace decir Krzysztof Zanussi en “Iluminación” esa fantástica película estrenada en 1972: “… la vida no es una ecuación matemática donde dos más dos siempre da cuatro”. Digo esto porque me gusta poner las cosas en tensión y vuelvo a los ejemplos de la historia.

* Alem e Yrigoyen acordaron con Mitre para enfrentar a Roca en 1890

* Yrigoyen recorrió cada pueblo del país para sostener la candidatura de Marcelo de Alvear en 1922

* Yrigoyen desde su lecho de muerte dijo: “…hay que rodearlo a Marcelo”

* Raúl Alfonsín acordó con Eduardo César Angeloz y Víctor Martínez la formula de 1983 dejando de lado a Conrado Storani

* Raúl Alfonsín acordando con Troccoli, Pugliese, Galván y De La Rúa

* Raúl Alfonsín acordó el Pacto de Olivos con Carlos Menem en 1993

* Raúl Alfonsín acordó la construcción de la Alianza en 1997

En lo partidario interno Leopoldo Moreau acordó junto a Raúl Alfonsín que Enrique García fuera Presidente del Comité de la Provincia allá hacia fines del los 80 o se olvidan de eso.

Nadie cuestionó estos hechos como se cuestionan ahora posibles acuerdos.

Y si cuestionamos estos acuerdos que dicen o dijeron de los acuerdos de Freddy con Leopoldo? De los acuerdos de Casella con Freddy? , realizados en su momento?

Hace poco Guillermo Banzas, un conocido virtual de facebook con el que discuto, reflecciono y me divierto en esa red social de comunicación, que fue testigo de muchos acuerdos políticos le dedico unos párrafos a Federico Storani, que me eximo de repetir porque seguramente él (Guillermo como afiliado y abogado podrá dar cuenta de hechos que me fueron contados pero que no conozco de primera mano), así que me relevo de reiterarlos en estas líneas.

O es que hay acuerdos buenos y acuerdos malos? Acuerdos que pueden ser justificados y otros reprochados?

Por favor, basta de hipocresía, cinismos varios y de denostar la inteligencia de las personas.

La historia en rica en cientos de ejemplos como estos. Basta estimados correligionarios y amigos de decir cualquier cosa. No todo es gratis y algunas cosas se terminan pagando.

Todo no va con todo.

Un partido es un colectivo con reglas, con programas y con mecanismos para la alternancia en sus órganos de gobierno.

Si como alguna vez escribió Ricardo Laferriere el internismo es una forma de degradación de la política, hay que dentro de los marcos legales presentarse a elecciones, poner a consideración de los afiliados los programas y después de la alevosa encrucijada del cuarto oscuro cuando hayamos contado los votos trabajar de cara al 2011, es el imperativo de este particular momento histórico.

Lo otro es discutir acerca de las nubes de Ubeda.

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