domingo, 10 de octubre de 2010

La nueva partidocracia de MS & Asoc. Entertainment Group, o un radicalismo para construir una sociedad para todos.

Vivimos horas complicadas los afiliados a la Unión Cívica Radical de todo el país y particularmente aquellos que vivimos en Vicente López, y por eso no nos podemos equivocar.

Sobre la cuestión nacional no me voy a explayar demasiado ya que esta claro que estamos cansados de las actitudes de la Dra. Carrió que ataca más que el peronismo en todas sus vertientes, y su ataque al partido y hacia algunos de sus dirigentes compartamos o no sus actitudes – insisto será motivo de otro análisis y no de este-, obedece a una cuestión subalterna y esta originado en su necesidad de posicionarse de cara a la elección nacional del 2011 cueste lo que cueste, sin importarle lo que quede en el camino. Salvando las distancias recuerdo las declaraciones del general retirado a conferencista en Barcelona y ex comandante en jefe de una banda ensangrentada de burócratas blindados – gracias Pablo Giusiani por la mejor definición de esos personajes -, que cuando se le preguntaban como veían la situación decía suelto de cuerpo “…nosotros evaluamos que podemos llegar a perder 5000 militantes pero después las masas tomaran el poder guiados por nuestra organización”; la Dra. Elisa Carrió - salvando las distancias que la diferencia de esos oscuros personajes -, dice en el fondo exactamente lo mismo; no me importa lo que hacen si no hacen lo que yo creo conveniente, total los corro a todos por izquierda así aglutino la auténtica oposición, y eso la lleva a coincidir en su estrategia con lo mejorcito del Peronismo Federal que de progresista no tiene nada más allá que Felipe Sola haya declarado que el es peronista desde 1968 y que en 1973 fue secretario de entonces Vice Canciller Jorge Vázquez, es decir que saco a relucir un pasado tangencialmente ligado a la Tendencia Revolucionaria de PJ, aunque después aclaró que eso le valió tener que “guardarse” varios años, es decir lo mismo que hicimos millones de argentinos que vivimos el exilio interior como pudimos. Volviendo a lo que intentaba decir tal vez alguien estuvo elucubrando una fórmula Carrió – Solá, ó, Carrió – Reuteman.

Eso sólo me mueve a risa.

Veremos cada cosa en el futuro, que eso será una pavada ya que ahora mirando a vuelo de pájaro las declaraciones de Kristina este año será cada día más divertido.
Sin embargo el primer problema que tenemos que resolver en el radicalismo y principalmente en el territorio de la Provincia de Buenos Aires es una cuestión de carácter interno y tiene que ver con la disputa por la dirección y el sentido de la acción política desde nuestro partido.

Leía hace un rato que Ricardo Campero hacía mención al Discurso de Parque Norte, ese documento político de 1985 que leímos, discutimos y tratamos de aplicar en nuestra práctica, se iniciaba con una descripción de la realidad de nuestro país y un análisis político de las razones por la cual estábamos así. Proponía construir una sociedad diferente y en consecuencia formulaba tres caminos para ello:

1.- Una democracia participativa
2.- Una ética de la solidaridad
3.- La modernización

Pero si no empezamos por nuestro propio partido a transitar esos senderos estoy seguro que no tenemos destino.


Hoy no nos podemos dar el lujo de caer en las provocaciones que la imaginativa mente de ideólogo de la sociedad comercial que nomine en el epígrafe y que gobierna con puño de hierro y la sutiliza de un elefante dentro de un bazar, - al mejor estilo de la antigua nomenclatura del politburó del PCUS por su metodología y no por su ideología -, los destinos de nuestro partido en la Provincia de Buenos Aires, me refiero al ex periodista, ex Diputado Nacional, ex Senador Nacional y ex candidato a Presidente de la Nación – que obtuvo el 2% de los votos del padrón nacional, el señor Leopoldo Moreau, un auténtico artista en fabricar mentiras y hacerse la victima.

El conjunto de los afiliados y los dirigentes que pretendan ser tal cosa, debemos actuar con coherencia ideológica, honestidad intelectual e inteligencia en la práctica diaria.

Para ello hay que recurrir a la historia que como ciencia aplicada nos indica que es a partir de los conocimiento de los hechos del pasado nos permite interpretar los hechos del presente y poder realizar una prognosis hacia el futuro.

La lucha por la disputa de dirección y el sentido político de la UCR en Vicente López no es ajena a la que se esta planteando en todo el país, donde los oportunistas de toda laya y pelaje, esperando que nuestro partido siga desgajándose por izquierda y por derecha, haciendo leña del árbol caído y arrojarse como buitres carroñeros sobre un cuerpo inerte.

Esta disputa de la que hablo tiene que ver no con personas, sino más bien, con la inexistencia de un auténtico proyecto político que se pretenda como la herramienta que vertebre y cohesione la sociedad cociendo la fisura de la pobreza, propiciando el empleo registrado, las nuevas formas asociativas para el trabajo sustentable, alimentando como corresponde al universo de los desprotegidos, cerrando la brecha de las deficiencias educativas, es decir construir una sociedad diferente en un país para todos.

Esta tarea es imposible en un marco donde impera el clientelismo y la partidocracia, un ambiente donde se pretenden acallan las voces de los que se expresan de otra manera, donde se unifica el discurso a través de la máquina de los adocenados que votan en una tragicómica y alevosa encrucijada de las manos levantadas para pretender justificar el despropósito político y la ajuridicidad de sus actos, negado de esta manera el primero de los caminos que nos señalaba en su momento el Presidente Alfonsín, una democracia participativa.

La resolución adoptada por el último Plenario del Comité de la Provincia; la posterior, - y jurídicamente hablando repugnante -, disposición adoptada por el Presidente de la Junta Electoral, como asimismo el comunicado de prensa de la mayoría de los miembros de la mesa directiva anunciando “posibles tomas” por parte de la barra del Club Atlético Platense de la sede de nuestro Comité de Distrito, son las pruebas palmarias, que a modo de confesión de parte me relevan de la necesidad de fundamentar lo que digo.

Seré más claro aún se toma una decisión sobre la que no se tiene competencia, un funcionario adopta una resolución sin los atributos necesario para pretender convalidar lo que la Carta Orgánica no faculta y por último se emite un comunicado de prensa que denuncia posibles actos y en consecuencia avisa que formulará denuncia policial y penal sobre la base de un puterio de peluquería para crear la estrategia del miedo.

La verdad sin embargo es otra y tiene dos aristas una es jurídica – institucional y la otra es política.
Nuestro Comité de Distrito está acéfalo ya que la intervención tenía fecha de vencimiento y esa fecha ya pasó es decir la intervención caducó de iure, sin que se designara nuevo interventor o se prorrogase el mandato del anterior, para conocer a señor correligionario que ocupa tal cargo proponemos presentar un recurso de habeas corpus preventivo ya que se desconoce su paradero.

La otra cuestión es política ideológica, ya que a partir del apogeo del neoliberalismo y de una tardomodernidad decadente y bizarra donde el postcapitalismo globalizado impone sus reglas borrando las diferencias y que opera al interior de la sociedad y de los partidos políticos mediante un proceso de vaciamiento ideológico.

Es así que a partir de este proceso se construye una nueva mayoría de matriz política aideológica, paraideológica y heterotópica respecto a la ideología de nuestro partido; que lo transforma así en un viejo vino en odres nuevos, merced a la conformación de una nueva nomenclatura gerontocrática, que reitera ad infinitum en un fenómeno que con la ayuda de Gilles Deleuze podríamos llamar del síntoma y la repetición de lo peor de las conducciones del unionismo, ya que tiende a poner en blanco sobre negro una lucha entre dos sectores claramente enfrentados en el seno de la UCR: por un lado una conducción aristocratizante de abolengo partidario donde los apellidos ilustres se reiteran una y otra vez, y por el otro un radicalismo plebeyo, popular, democrático, nacionalista y de izquierda. Por un lado un modelo partidario sostenido manu militari por una nomenclatura que sólo pretende mantener el actual status quo, las dádivas y las prebendas que devienen del aparato, y por el otro uno que busca incansablemente la forma de expresarse para construir esa sociedad para todos de la que hablaba Raúl Alfonsín en su discurso de Parque Norte, una sociedad que soñaron en sus tiempos, los padres fundadores de nuestra nación Belgrano, Moreno, Castelli, San Martín, como los de nuestro partido: Alem, Yrigoyen, Lebensohn, Larralde, Sabattini y Arturo Illia. Porque hay que tener en claro dos cosas cuando un partido tiene ciento veinte años de vida es que esa formación política es parte indisoluble del pueblo argentino y porque las razones de su origen y su programa de reparación moral y política sigue siendo el programa de pueblo argentino. Esta parte de la realidad es la trágica.

La cómica es que los auténticos artífices de esta situación en lugar de basar su accionar en hechos concretos, y que para colmo de males – olvidándose de sus actos del pasado -, cuando anuncian que harán las denuncias policiales y judiciales pertinentes, digo olvidándose de su pasado porque la nomenclatura partidocrática era especialista allá en los años 70, cuando alguno de los firmantes del documento ni siquiera habían nacido, otros jugaban a la bolita miraban al Capitán Marte y el XL 15 por canal 11, en tanto los propietarios de la sociedad comercial que rige los destinos de nuestro partido era especialista en “tomar por asalto” la casa radical de Tucumán 1660 a la que llamaban despectivamente “la eléctrica” o el viejo Comité Provincia en Moreno al 2400, sin que el oficialismo partidario hiciera ninguna denuncia de ningún tipo, esa actitud en mi barrio se llama de otra manera.

Insistir hay que transitar un camino judicial y pedir que se expida sobre la ajuridicidad de la Resolución de la Junta Electoral y del Plenario de Delegados para excluir a nuestro distrito del llamado a elecciones internas por un lado y por el otro denunciar la acefalía habida cuenta que el mandato del interventor caducó. Eso en lo jurídico - político; en lo estrictamente polítco hay que movilizar a los militantes convocandolos a participar de un debate más serio del que nos proponen los responsables del partido del 2%. Calma radicales porque como decía Alem: "el futuro es del porvenir y el porvenir es nuestro"

Saludos cordiales a todos

No hay comentarios: